Severos cuestionamentos del CAT sobre tortura y violencia sexual en México
Los días 8 y 9 de noviembre, el Estado mexicano presentó ante el Comité Contra la Tortura de las Naciones Unidas (CAT), su cuarto informe periódico sobre el cumplimiento en el país de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y/o Degradantes, durante el 37° período de sesiones de este Comité llevado a cabo en Ginebra, Suiza.
De acuerdo con los procedimientos del CAT, fue permitida la presencia deorganizaciones no gubernamentales para presentar informes alternativos ante los expertos. En este contexto, la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos « Todos los Derechos Para Todas y Todos», integrada por 55 organizaciones mexicanas, expuso un informe paralelo sobre la situación de la tortura a nivel nacional presentando además 58 casos de tortura documentados por grupos dicha Red, mismo que sirvió para evidenciar el incumplimiento del Estado mexicano en aspectos sustantivos de la Convención[1].
Asimismo, la Organización Mundial contra la Tortura (OMCT), el Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (CLADEM) y el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), presentó el informe titulado « Violencia de Estado contra Mujeres en México: El caso San Salvador Atenco »[2]. En dicho documento, exponemos ante el CAT las agresiones sexuales cometidas en contra de las mujeres detenidas en Atenco por parte de agentes policíacos, enfatizando que tales abusos configuran actos de tortura. Con base en ello, solicitamos que emita recomendaciones al Estado mexicano para garantizar una investigación pronta, expedita e imparcial sobre el caso Atenco.
Por su parte, el Estado mexicano enfatizó algunos avances en la reforma del Sistema de Seguridad Pública y de Justicia Penal; la implementación del Dictamen Especializado para determinar actos de Tortura y/o Maltrato por parte de la Procuraduría General de la República (PGR); así como la supuesta reducción de la tortura en México, con base en el número de quejas presentadas ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos y las comisiones locales. Además, la representación del Estado se refirió a los pretendidos esfuerzos realizados para investigar la violencia sexual y discriminatoria contra las mujeres, específicamente en los casos de Ciudad Juárez y San Salvador Atenco.
No obstante, los expertos del CAT cuestionaron severamente al Estado mexicano haciendo referencia a una gran diversidad de temas. Dentro de estos, fue evidente la preocupación de los expertos por las violaciones a derechos humanos cometidas contra las mujeres en San Salvador Atenco. Asimismo, manifestaron que era evidente que los abusos sexuales y violaciones contra mujeres por parte de agentes del Estado constituyen actos de discriminación y tortura contrarios a los derechos protegidos por la Convención y que, por tanto, deben ser investigados exhaustivamente.
Los expertos también cuestionaron la extensión de la jurisdicción militar para aquellos casos en los que elementos castrenses cometen una violación a los derechos humanos en contra de civiles.
Finalmente, criticaron la limitada aplicación de los tratados internacionales de derechos humanos en el ámbito nacional; específicamente en cuanto a la tipificación de los malos tratos como actos que también prescribe la Convención Contra la Tortura, y la prescriptibilidad de los crímenes de lesa humanidad cometidos en el pasado.
En suma, durante la comparecencia del Estado mexicano ante el CAT los cuestionamientos de los expertos evidenciaron que pese a que México ha firmado y ratificado numerosos instrumentos internacionales e implementado algunas medidas legislativas y políticas públicas para erradicar la tortura, esta práctica sigue presentándose con una impunidad alarmante. Igualmente, quedó probado que la falta de armonización entre los instrumentos internacionales de derechos humanos y la legislación nacional es grave y que esto constituye un rezago en materia de derechos humanos que debe ser atendido con prontitud.
El CAT deberá hacer públicas sus observaciones y recomendaciones finales al Estado mexicano al término de la presente sesión, que será el 24 de noviembre. Su implementación será objeto de monitoreo por parte de las organizaciones mexicanas mencionadas y la Organización Mundial Contra la Tortura, quienes también se han congratulado por la emisión de las recomendaciones del Comité sobre la Eliminación de la Discriminación hacia las Mujeres (CEDAW) de la ONU, sobre el caso Atenco en el mes de agosto pasado.
[1] Ver enlace http://www.ohchr.org/english/bodies/cat/docs/ngos/redtdt_sp.doc.
[2] Ver enlace http://www.ohchr.org/english/bodies/cat/docs/ngos/omct_sp.pdf.